sábado, 27 de enero de 2007

Unas cañitas en Alcorcón

Parece que se va a montar... sinceramente, espero que no... Pero en realidad, se monta todos los días, en campos de futbol, en radios, en televisiones, en discotecas... En este caso se pone la etiqueta de inmigración, latin kings, bandas callejeras, pero lo que realmente importa es la falta de respeto de y hacia los demás, sean quien sean esos todos...

Chavales que no tienen el suficiente control por parte de los padres, que se sienten distintos (y los chavales también), que tienen, como cualquier hijo de vecino, las hormonas hirviendo y los huesos creciendo; esos chavales que ha habido siempre en todas partes; esos chavales que hemos sido todos alguna vez... Chavales que se ven metidos en un circulo alrededor del cual están (estamos) los adultos, que hacen de todo un gran problema social, sin pararse a pensar el daño irreversible que pueden (podemos) hacer.

Hemos llevado un problema de un barrio de una ciudad (el otro día, escuchando a la gran actriz Concha Velasco, me quede perplejo cuando se refirió a Alcorcón como una barriada), al enfrentamiento entre emisoras de televisión y radio, entre políticos y entre gente distinta por raza, sexo, ideología o sentimientos.

Hoy han "quedado" (creo que no sólo para tomar uno de los aperitivos maravillosos que ofrecen los bares y restaurantes del encantador centro de Alcorcón) una serie de personas (por que, a pesar del pesar de muchos de nosotros, lo son) para reivindicar un suelo para sí mismos, un parque para ellos, un País propio, unos rasgos, un acento... creo que lo definen como Libertad y se les llena la boca... Son los mismos que van a un campo de Futbol... ¿a qué? o salen por las noches por Moncloa... ¿a qué? ¿A pedir Libertad?... Por favor.. la libertad es de todos, y hay que tener muy claro que ha estos Homo sapiens (por que, a pesar del pesar de muchos de nosotros, lo son) les falta su libertad para poder quitar libertad a otros...

No defiendo actitudes propias de bandas como Latin Kings, pero tampoco defiendo a los que argumentan que se vayan a su País o Vienen de fuera para jodernos la vida... Y tampoco defiendo pseudoinformaciones que lo único que consiguen son efectos propagandísticos de los mal que está el mundo y lo bien que podemos dejarlo unos cuantos.

Ojalá, hoy, en Alcorcón, se pueda disfrutar de unas cañas con unas migas, o un Vermout fresquito. Pero me da a mi que no.

1 comentario:

David Sevilla dijo...

Y yo sin saber que tienes blog... juer, ¡ya puedes ponerte a escribir, chaval, que te ha salido un fan!

Un abrazo,

Sevi